Una tormenta provocó un brusco descenso de las temperaturas y cubrió de nieve y hielo las llanuras sureñas de Estados Unidos, dejando a miles de personas sin electricidad, obligando a cancelar vuelos y complicando el tráfico.

 La compañía eléctrica de Texas inició los cortes de luz alternos el lunes por la mañana, de modo que miles de personas sufrieron cortes breves en el suministro eléctrico mientras las temperaturas bajaban de los 6 grados centígrados bajo cero (20 grados Fahrenheit) y rondaban los 3 grados centígrados bajo cero (25 grados Fahrenheit) en la zona de Houston.

 "Instamos a los texanos a poner la seguridad ante todo", tuiteó la compañía, Electric Reliability Council of Texas (ERCOT). Instó a los residentes a reducir su consumo de energía.

   ERCOT describió los cortes alternos como un "último recurso para preservar la confiabilidad del sistema eléctrico en general", y agregó que las compañías de servicios deben determinar cómo reducir la demanda. 

 "Cada operador de red y cada compañía eléctrica está actualmente luchando para restablecer la energía", dijo en un comunicado el presidente y director general de ERCOT Bill Magness. 

  Casi 2,6 millones de clientes estaban a oscuras en torno a las 8:20 de la mañana, según poweroutage.us, un sitio que monitorea los suministros básicos.

 Matt Varble de Las Colinas, un suburbio de Dallas, dijo que se había quedado sin electricidad un par de veces la madrugada del lunes, reportó el periódico The Dallas Morning News. La segunda ocasión fue aproximadamente a las 3:30 de la madrugada y no se restableció sino hasta las 7 de la mañana. 

 "Empieza a sentirse mucho frío en mi casa", dijo Varble al periódico. "Viví en el norte durante mucho tiempo y nunca sucedió algo así cuando vivía en Nueva York, Ohio o Illinois". 

  Aproximadamente 5.000 clientes de Oklahoma se quedaron sin electricidad durante la noche, y en Arkansas hubo 3.000 apagones. Ambos estados tienen muchos menos habitantes comparados con Texas. 

 Funcionarios en Houston habían advertido a la gente que se preparara para apagones y carreteras peligrosas, condiciones similares a las que podría esperar la gente tras un huracán de categoría 5.

  La región se ha preparado para el clima invernal durante el fin de semana. El gobernador de Texas, Greg Abbott, declaró la situación de desastre en los 254 condados del estado. Abbot, el gobernador de Oklahoma Kevin Stitt y el de Arkansas, Asa Hutchinson, activaron sus respectivas unidades de la Guardia Nacional para asistir a las agencias estatales en labores como el rescate de automovilistas varados.

 El presidente Joe Biden también declaró una emergencia en Texas en un comunicado el domingo por la noche. La intención de la declaración es permitir apoyo federal a los esfuerzos estatales y locales.

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