EL PASO - El presidente Trump volvió esta tarde a Washington, luego de su visita a la comunidad de El Paso.

En un monumento en conmemoración a los fallecidos, encontramos anuncios que hablan sobre la inmigración e incluso vemos la bandera de México.

El miércoles por la tarde hubo un incidente en el que dos seguidores del presidente Trump coreaban, cuando uno de los dolientes respondió molesto.

Es solo poco de lo que provocó la visita del presidente Trump.

Estuvo en El Paso para reunirse con la comunidad y las víctimas de la balacera del sábado pasado.

Habló con sus familias y los primeros auxilios.

Al llegar, fue recibido por el gobernador de Texas y otros líderes, pero también hubo oposición.

Más de 20 mil personas firmaron una carta pidiendo que el presidente no viniera.

Fue redactada por un grupo de inmigrantes que representaban a la comunidad llamada Border Human Rights Network.

Expresaron su temor de ser el blanco, ya que eso fue escrito en el manifiesto del atacante quien además detalló sobre sus prejuicios contra hispanos.

"Mi hijo de 14 años se me acercó. Normalmente es muy callado. Pero me vio y me dijo, 'Papá, tengo miedo'. Es ciudadano estadounidense. Sabe que me dedico a organizar y defender los derechos humanos y las comunidades, e incluso así se sintió atemorizado. Entonces pensé, ¿qué le pasa a las familias inmigrantes? A la gente que vive separada por el temor constante," menciona Fernando Garcia, fundador de Border Human Rights Network.

El senador de Texas, Ted Cruz, recibió al presidente.

Respondió a inquietudes sobre la retórica del presidente.

Cruz explicó que como hispano, se sentía "horrorizado" por lo que se dice de los motivos del atacante, pero también está en desacuerdo con el diálogo político.

"Mira, hay mucha gente en el mundo político que intenta aprovecharse de esta tragedia para su beneficio y eso no es lo que necesitamos en este momento.

Necesitamos unidad y en cuanto a la retórica, creo que todos necesitamos bajar su nivel en ambos lados de la política. Este es un tiempo de división, pero se trata de un terrorista supremacista blanco e intolerante.”

La tensión llevó a que el departamento de policía de El Paso tuiteara:

"El monumento tenía el fin de honrar a las víctimas. No queremos lo contrario peleando entre nosotros. Detengan el odio.”