Luego del anuncio por parte del gobernador de Texas algunos negocios han optado por continuar con los protocolos de salud.

A pesar de que a partir del 10 de marzo el uso de cubrebocas ya no será obligatorio.

Esta orden ejecutiva anula la mayoría de las órdenes ejecutivas previas del Gobernador relacionadas con COVID-19.

Además, esta orden pone fin al mandato del uso de máscaras en todo el estado de Texas. Las empresas podrán implementar protocolos de seguridad adicionales o limitar la capacidad a su propia discreción.

Abbott dijo  que las instalaciones de cuidado de niños, campamentos juveniles, algunos deportes profesionales y bares ahora pueden comenzar a reabrir total o parcialmente sus instalaciones como se describe en las regulaciones que figuran en el sitio web de Open Texas.

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