El trastorno depresivo persistente (TDP) no es tan grave como la depresión, pero los adultos pueden luchar contra sus síntomas durante años.

Según la clínica Cleveland, el tres por ciento de los estadounidenses lo padecen en algún momento de su vida.

"La gente a veces no se da cuenta de que puede tenerlo porque es muy subjetivo", agrega Jyoti Mishra Ramanathan, PhD, Neurocientifico – UCSD.

Los síntomas de la P-D-D incluyen un estado de ánimo triste, fatiga, falta de concentración, baja autoestima, problemas para dormir y falta de apetito o comer en exceso.

"Estamos viendo tus cambios de humor del día a día. Así que no me digas solo cómo te sientes en este momento", agrega Jyoti Mishra, PhD.

Los científicos afirman que el primer paso del tratamiento suele ser la prescripción de medicamentos antidepresivos.

"Entre el 30 y el 50 por ciento de las personas responden al tratamiento estándar, los antidepresivos disponibles. Aparte de los antidepresivos, también hay psicoterapia disponible", agrega Jyoti Mishra, PhD.

Los expertos en salud afirman que algunos cambios en el estilo de vida también pueden ayudar.

 Esto incluye seguir una dieta equilibrada, hacer ejercicio varias veces a la semana y limitar el consumo de alcohol.

 También hay actividades que pueden ayudar a las personas a sobrellevar los efectos del trastorno depresivo persistente.

Los expertos médicos sugieren ir al cine o a un partido de béisbol, pasar tiempo con amigos, disfrutar del aire libre o asistir a clases de yoga.

La clínica Cleveland afirma que el trastorno depresivo persistente es más frecuente en mujeres y puede afectar a personas de cualquier edad, incluidos niños y adolescentes.