SUTHERLAND SPRINGS - Ha pasado una semana desde el tiroteo masivo en una iglesia bautista, y esta noche la iglesia abrió sus puertas al público por primera vez desde la masacre, revelando un conmovedor lugar conmemorativo en homenaje a las 26 vidas perdidas.

El pastor asociado Mark Collins dice que fue difícil decidir que el público regresara.

"Algunos por supuesto no quieren sentarse en este edificio otra vez y otros dicen, necesitan hacerlo" dijo el pastor.

Cerca de mil personas asistieron, dentro del santuario ahora hay un sombrío tributo.

26 sillas... 26 rosas rojas.

Cada una marcada con un nombre.

Cada una ubicada en el lugar donde la persona fue baleada el domingo pasado.

La alfombra llena de sangre ya no está. Rellenaron y pintaron los agujeros de bala en las paredes.

Todas las personas que entraron, salieron llenas de emoción.

La iglesia aún no ha decidido qué harán con el edificio.

La congregación decidirá si lo demolerán y construirán un nuevo lugar conmemorativo ó si la iglesia existente será uno permanente.

El pastor planea ofrecer servicios en el terreno de la iglesia el próximo domingo.