Las actividades de verano comienzan y la prioridad es la seguridad. Por ello, es importante estar familiarizados con habilidades que puedan salvar vidas.

Una de estas es el RCP o más conocida como reanimación cardiopulmonar. "Es imperativo que aprendamos como padres como administrar la reanimación cardiopulmunar así como primeros auxilios. Sabes, no quieres pasar por una situación en la que necesites ese entrenamiento para salvar una vida y no tenerlo", comenta Rubén Contreras, un padre de familia de tres hijos. 

Rubén está entrenado en esta habilidad y anima a otros padres a aprender, ya que pueden ser necesaria en cualquier momento.

"Tengo hijos pequeños y van a nadar y como no hay una edad mínima para nadar, creo que es importante que aprendan a administrar la RCP", precisa Nico Garza, otro padre de familia. 

El ahogamiento es la causa principal de muerte en niños, según los centros para el control y la prevención de enfermedades (CDC). 

Los infantes de uno a cuatro años son los que se encuentran en mayor riesgo. Cada segundo cuenta y ante un caso de ahogamiento o ataque al corazón, lo que marca la diferencia entre la vida y la muerte es saber cómo realizar correctamente las compresiones en el pecho.

Cuando alguien sufre un paro cardíaco, su corazón deja de bombear sangre. Si alguien realiza RCP, imita al corazón y ayuda al cuerpo a mover esa sangre.

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