Entre mayo y septiembre del 2022, 36 millones de dosis letales de fentanilo fueron retiradas de las comunidades de estados unidos como resultado del aumento de las medidas de represión para reducir el suministro de fentanilo en el país.

Como parte de la iniciativa "una píldora puede matar", la D.E.A. y sus colaboradores en la aplicación de la ley incautaron más de 10.2 millones de píldoras de fentanilo y aproximadamente 980 libras de fentanilo en polvo.

 De los 390 casos investigados durante este periodo, 51 están relacionados con intoxicaciones por sobredosis y 35 se vinculan directamente con uno o ambos de los principales cárteles mexicanos responsables de la mayor parte del fentanilo en Estados Unidos: el cártel de Sinaloa y el cártel de Jalisco nueva generación.

"Los dos carteles en Mexico que son responsables de la gran cantidad de fentanilo que hay en Estados Unidos hoy, que está envenenando y matando a los estadounidenses. La DEA formará dos equipos, uno dedicado exclusivamente al cartel de Sinaloa y otro a Cartel Jalisco Nueva Generacion" dijo Anne Milgram titular de la D.E.A.

Sin embargo, las mismas autoridades reconocen que esto es resultado de la misma campaña realizada en 2021, resaltando que en todo el país, el fentanilo está devastando a las familias y las comunidades.

Milgram enfatizó la importancia del proyecto, "Lo que es importante para todos nosotros, es que sabemos que se perdieron 107 mil 622 vidas, pero todas y cada una de ellas son una vida perdida y vemos sus rostros todos los días en sus familias".

El fentanilo sigue siendo la amenaza de drogas más mortífera que enfrenta esta nación. En 2021, 107.622 estadounidenses murieron por una sobredosis de drogas, el 66% de esas muertes puede atribuirse a opioides sintéticos como el fentanilo el cual es 50 veces más potente que la heroína.

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