Durante la pandemia, los asilos de ancianos han sido los más afectados por el coronavirus.

Varios de estos asilos, particularmente en el condado Cameron han tenido numerosos casos y muertes.

Para eso, el gobernador de Texas Greg Abbott anunció una nueva medida donde a todos los pacientes y trabajadores en asilos de ancianos se les haga la prueba del coronavirus.

Este viernes en un comunicado, el gobernador dijo que tomó esta medida para proveerle pruebas de COVID-19 a los más vulnerables.

La mayoría de los contagios han sido en asilos de Harlingen como Veranda, Windsor Atrium y Spanish Meadows.

Ayer en el Windsor Atrium, hubo dos decesos más de una mujer de 75 años de edad y un hombre de 86 años de edad.

Según el gobernador Abbott, los bomberos municipales harán estas pruebas adentro de los asilos en coordinación con autoridades de salud del condado y del estado de Texas.

El municipio le pedirá al condado el equipo requerido para hacer las pruebas y el condado le pasará el pedido al gobierno estatal.

SOMOS NOTICIAS se puso en contacto con los municipios de Harlingen y Brownsville, lugares donde se encuentran los focos de contagio en los asolos. Pero ninguno tiene un plan exacto de las nuevas medidas.

En el condado Hidalgo, el teniente de los bomberos de McAllen dice que por ahora está colaborando con los asilos para saber cuáles son sus necesidades durante la pandemia, pero no saben cuándo el estado les va dar una directriz en cómo implementar estas pruebas.